Empatía

- "Si yo soy "yo" y tu eres "tú"... ¿Entonces quien soy yo?"

Aún recuerdo aquel viejo juego de escuela que solia practicar en la escuela básica (o primaria)... Recuerdo que era bastante molesto ya que no tenia una respuesta definida: si te respondían "yo" les decias "¿Pero como puedo ser tú?" y si por el contrario, te respondían "tu" argumentabas "¿Como puedo ser tu si yo soy "yo"?"... Al final no tenia sentido de ninguna forma, no existia manera de que quien respondiera tuviese la razón. Era igualmente ilógico y sin sentido el ser "yo" o el ser "tú".

Ultimamente he pensado mucho en esto... si bien a primera vista puede parecer idiota e infructuoso meditar respecto a algo tan pedestre y falto de importancia, detras de esa frase existe una verdad muy grande: si yo soy "yo"... ¿Como puedo ser "tu"?. Es ilógico ¿cierto? no puedo pretender ser 2 personas al mismo tiempo, no puedo intentar ser alguien que no soy o por lo menos eso es lo que me dicta la lógica: Soy un ente único definido por mi información genética, el mundo que me circunda y mis vivencias, tengo un rostro y un cuerpo que me diferencian del resto del género humano en conjunto con mis recuerdos, convirtiendome en una entidad viviente única e irrepetible. Entonces... ¿Por qué nos esforzamos en tratar de sentir, pensar y ser como otra persona? ¿Por qué razón inventamos algo tan antinatural y hasta cierto punto imposible de lograr como la empatía?.

Esta idea cobró más fuerza todavía luego de leer "¿Soñaran los androides con ovejas eléctricas?" del escritor norteamericano Philip K. Dick (padre del ciberpunk junto con William Gibson), libro bastante dificil de digerir y muy desesperanzador que más tarde y gracias al gran director Ridley Scott se convirtió en película bajo el nombre de "Blade Runner", aunque cabe destacar que ambos (libro y largometraje) solo comparten a ciertos personajes y parte de la agobiante atmósfera de un mundo sumido en la desgracia en el cual el abandono, la miseria y la tecnología se han convertido en inseparables compañeros de viaje del ser humano, necesitando y odiandolos al mismo tiempo. En este libro el autor se cuestiona la importancia de la empatía en la vida de las personas, llegando a la conclusion de que -por lo menos desde un punto de vista psicológico- es la caracteristica que más define al ser humano y lo diferencia del resto de los seres vivientes. Para eso nos hace reflexionar respecto a los fatidicos resultados que se producirian en el mundo animal si existiese tal sentimiento en la naturaleza: si un león tuviese empatía no podria devorar a una gacela (por ejemplo) al pensar en el dolor que esta podria sentir mientras es cazada y devorada, menos aún pensando en la familia que esta deja atras con su muerte, ya que lo más probable es que tuviese crias (las cuales si son pequeñas moririan sin su madre) o fuese el hijo de otra gacela la cual se apenaría mucho con su muerte. En otras palabras el mundo animal se extinguiría si en él existiese este sentimiento. Por otra parte esto nos remite a una pregunta un poco compleja: dado que la vida ha existido durante millones de años y el ser humano solo hace unos miles de años... ¿Estaremos en lo correcto al haber desarrollado la empatía? ¿Cual de los dos mundos está errado?... Gran dilema.

Luego de pensarlo durante mucho tiempo he llegado a la siguiente conclusion: La empatía en el ser humano es necesaria en etapas tempranas de desarrollo; el poder ponerme en los zapatos del otro me permite darme cuenta de que lo que me pasa a mí tambien le puede ocurrir a otra persona. De esta forma se desarrolla la consciencia, pero una vez que la consciencia está desarrollada ya no necesito más de la empatía, esta solo me retrasa y me dificulta innescesariamente la vida al hacerme más dificil la toma de desiciones y provoca que haga mío un problema que en principio nada tenia que ver conmigo.

Recorde luego el efecto que produjo en mí la fluoxetina (vease articulo anterior), ya que a la larga el hecho de no poder sentir pena ni por mi ni por nadie termino por eliminar la empatía de mi persona (por lo menos mientras la consumia). Me converti en una persona un poco cruel ya que no me importaba la pena o el dolor que otra persona pudiese experimentar por lo que yo decía, asi que nada me limitaba a la hora de decir las cosas que realmente queria decir... fue una gran experiencia tomando en cuenta de que a lo largo de mi vida por no ser cruel o grosero en situaciones publicas terminaba siendo yo el que resultaba herido en diversos tipos de discuciones... ahora yo me habia convertido en el cegador y era realmente una sensacion maravillosa: el poder sentir que nadie ni nada tenian un control sobre mi, ni sentimientos ni emociones, por fin todo se veía subyugado al poder del pensamiento y no al de la emoción, la que en demasiadas ocasiones nos juega malas pasadas haciendonos actuar y decir cosas que en otras ocasiones y con la mente fria no haríamos.

Todo esto me recordó demasiado una pelicula española del 2005 llamada "El Clan de los Sin Nombre". En esta pelicula un culto bastante siniestro pretendía crear a un ser humano que fuese maldad pura, para esto raptaban niños y los criaban desde pequeños para enseñarles lo que debian ser y hacer. Al recordar la trama pense: "pero si es muy facil... denle fluoxetina a una persona desde que nace hasta que ya es adulto: van a impedir que se desarrolle su consciencia y se va a transformar en alguien egoísta a más no poder, interesado solo en sus necesidades y sin emociones. Sería alguien capaz de matar y hasta de suicidarse sin remordimientos ni pena alguna y utilizaria al resto del género humano para satisfacer sus deseos y anelos personales sin importarle el costo". Aunque no dejo de preguntarme... ¿Existiría alguien tan loco o cruel como para hacer una atrocidad como esa?. Me respondo a mi mismo: en este mundo retorcido y demencial más de alguno seria capaz de aquello.